OVNI. Estados Unidos

Una noche en nuevo México, Ethan Siegel se encontró con algo que lo mantuvo despierto durante casi dos décadas.

Muchos casos de avistamiento de Ovnis se atribuyen fácilmente a estrellas, aviones, flashes, drones y otras cosas mundanas, pero cuando la persona que informó la observación es un piloto, policía, militar o científico, tendemos a prestar más atención a lo que vieron y pensaron que era.

En un artículo reciente para Big Think, el Dr. astrofísico Ethan Siegel describió una observación de Ovnis que ha estado tratando de dar sentido durante años, pero que continúa siendo un completo misterio.

Esto sucedió en diciembre de 2006, cuando él y un amigo regresaban de un viaje al parque nacional Bandelier en nuevo México.

Estaban conduciendo a través de un desierto remoto al anochecer, cuando Siegel notó una "luz azul brillante en forma de elipse" que al principio estaba inmóvil en el cielo y luego comenzó a moverse lentamente.

"Se volvió más brillante a medida que se acercaba, pero no se parecía a nada más que un disco azul sólido, y parecía estar ganando velocidad a una velocidad alarmante", escribió. "Luego corrió hacia la derecha, más rápido y más lejos de nosotros, y después de aproximadamente dos o tres segundos de conducir a la velocidad máxima, la luz simplemente se apagó".

Lo interesante de esta observación es cómo Siegel se involucró en la deconstrucción de lo que vio, tratando de descartar varias explicaciones tradicionales basadas en su propia experiencia.

Finalmente llegó a la conclusión de que no podía encontrar una respuesta definitiva; en cambio, presentó una serie de opciones poco probables, en su opinión, incluida la variante de origen extraterrestre.