| ID | #1555670762 |
| Añadido | Vie, 19/04/2019 |
| Autor | July N. |
| Fuentes | Irene Granchi, UFOs and Abductions in Brazil
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| Fenómenos | |
| Estado | Estudio
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Datos iniciales
Aproximadamente un mes después de haber visto luces misteriosas sobre el territorio, el testigo, el señor Decir, esperando un taxi para irme a otra zona, cuando me di cuenta de que más allá de проходт el hombre del sombrero y el oscuro manto. El hombre se detuvo y miró fijamente a él. Él miró hacia atrás.
En este momento, su amigo, es muy rápido el conductor se detuvo y se lo ofreció a llevar. Su completa sorpresa, alcanzando el punto de destino, y al salir de la máquina, de nuevo se enfrentó con el mismo extraño hombre que vi solo unos momentos atrás y le miró en los ojos.
Una noche, después de un tiempo, de repente decidió que quería comprar cigarrillos. Tomó su auto y bajo alguna coacción encontró que va en la otra parte de la ciudad, en leblon, que en aquellos días era todavía bastante desiertas de la zona. Le parecía que él se somete a la orden. Pero no podía recordar nada de lo que ha hecho durante este tiempo.
Al día siguiente trató de recordar lo que pasó, y a veces se acordaba de que había visto a ese hombre.
En otra noche, otra vez sentí el deseo de salir, y se encontró con el mismo hombre que había visto en ese día lluvioso. el hombre se acercó a él. Esta vez se acordó de cómo sacó su bolígrafo "parker" de su bolsillo de la camisa conocidos por el gesto de hacer algo para escribir. Él inmediatamente me sentí como algo caliente, lo golpeó en la mejilla. Durante mucho tiempo después de eso, tenía una cicatriz en la mejilla derecha. En ese mismo instante, se soltó de su pluma, que cayó en el suelo de su coche.
Una de las cosas que él podía recordar, eso es lo que extraño no hablaba en voz alta, pero él entendía todo lo que decía el hombre (telepáticamente?).
Al día siguiente, encontró a su pluma, y, para su sorpresa, ahora la tapa se ha roto ideal de un agujero redondo en el cuarto de pulgada. A continuación siguió un largo período, durante el cual el sr. Decir, sufrió una terrible pérdida de la memoria. Cada vez que él intentaba recordar lo que pasó, él sentía un fuerte dolor en la nuca. Recuerda que en una de sus futuras de los sueños experimentaba una sensación de ingravidez. Abandonó la hipnosis.
Detalle interesante, que informó en su descripción de la persona con la que se encontró, fue que, aunque sus ojos eran muy grandes, no se lagrimal por conductos.
Traducido del servicio de «Yandex.Traductor»
Noticias originales
About a month after seeing mysterious lights over the area, the witness, Mr. E was waiting for a taxi to take him to another district when a man passed by, wearing a hat and a dark colored raincoat. The man stopped and stared at him very fixedly. He stared back. At this moment, an acquaintance of his, a very fast driver, stopped by and offered him a lift, which he accepted. To his utter surprise, upon reaching his destination and getting out of the car, he was once again confronted by the same strange man he had seen only a few moments earlier, staring at him. One evening some time later, he suddenly decided he wanted to buy some cigarettes. He took his car and under some kind of compulsion, found himself driving to the other side of town, to Leblon, which in those days was still quite a deserted district. He felt as though he was obeying an order. But he could not remember anything of what he had been doing during this time. He slept soundly. The next day he tried to remember what had happened and sometimes he recalled having seen a person. On another evening sometime after that, he again felt this compulsion to go out, and was met by the same person he had seen on that rainy day; the man approached him. This time he recollects having drawn his Parker fountain pen from his shirt pocket in a familiar gesture, to jot something down. In doing so, he immediately felt something warm strike his cheek and burn it. For a long time after this he had a scar on his right cheek. At the same moment, he let go of his pen, which fell to the floor of his car. One of the things he was able to remember is that the stranger did not speak but he himself understood all that was being said by the man (telepathically?). The next day, he found his pen and, to his surprise the cap was now pierced by a perfectly round, quarter inch hole. There followed a long period during which Mr. E suffered a dreadful loss of memory. Every time he tried to recollect what had happened, he suffered severe pain in the nape of his neck. He remembers that in one of his subsequent dreams he had a feeling of weightlessness. He refused to undergo hypnosis. An interesting detail he reported in his description of the person he encountered was that, although his eyes were very large, there were no tear ducts.
Hipótesis
Investigación
Currículum
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